Curso HTML5, CSS3 y Javascript
Introducción
HTML5 no es una nueva versión del antiguo lenguaje de etiquetas, ni siquiera una mejora
de esta ya antigua tecnología, sino un nuevo concepto para la construcción de sitios web y
aplicaciones en una era que combina dispositivos móviles, computación en la nube y
trabajos en red.
Todo comenzó mucho tiempo atrás con una simple versión de HTML propuesta para
crear la estructura básica de páginas web, organizar su contenido y compartir información.
El lenguaje y la web misma nacieron principalmente con la intención de comunicar
información por medio de texto.
El limitado objetivo de HTML motivó a varias compañías a desarrollar nuevos lenguajes
y programas para agregar características a la web nunca antes implementadas. Estos
desarrollos iniciales crecieron hasta convertirse en populares y poderosos accesorios.
Simples juegos y bromas animadas pronto se transformaron en sofisticadas aplicaciones,
ofreciendo nuevas experiencias que cambiaron el concepto de la web para siempre.
De las opciones propuestas, Java y Flash fueron las más exitosas; ambas fueron
masivamente adoptadas y ampliamente consideradas como el futuro de Internet. Sin
embargo, tan pronto como el número de usuarios se incrementó e Internet pasó de ser
una forma de conectar amantes de los ordenadores a un campo estratégico para los
negocios y la interacción social, limitaciones presentes en estas dos tecnologías probaron
ser una sentencia de muerte.
El mayor inconveniente de Java y Flash puede describirse como una falta de
integración. Ambos fueron concebidos desde el principio como complementos (plug-ins),
algo que se inserta dentro de una estructura pero que comparte con la misma solo
espacio en la pantalla. No existía comunicación e integración alguna entre aplicaciones y
documentos.
La falta de integración resultó ser crítica y preparó el camino para la evolución de un
lenguaje que comparte espacio en el documento con HTML y no está afectado por las
limitaciones de los plug-ins. Javascript, un lenguaje interpretado incluido en navegadores,
claramente era la manera de mejorar la experiencia de los usuarios y proveer
funcionalidad para la web. Sin embargo, después de algunos años de intentos fallidos para
promoverlo y algunos malos usos, el mercado nunca lo adoptó plenamente y pronto su
popularidad declinó. Los detractores tenían buenas razones para oponerse a su adopción.
En ese momento, Javascript no era capaz de reemplazar la funcionalidad de Flash o Java. A
pesar de ser evidente que ambos limitaban el alcance de las aplicaciones y aislaban el
contenido web, populares funciones como la reproducción de video se estaban
convirtiendo en una parte esencial de la web y solo eran efectivamente ofrecidas a través
de estas tecnologías.
A pesar del suceso inicial, el uso de Java comenzó a declinar. La naturaleza compleja
del lenguaje, su evolución lenta y la falta de integración disminuyeron su importancia
hasta el punto en el que hoy día no es más usado en aplicaciones web de importancia. Sin
Java, el mercado volcó su atención a Flash. Pero el hecho de que Flash comparte las
mismas características básicas que su competidor en la web lo hace también susceptible
de correr el mismo destino.
Mientras esta competencia silenciosa se llevaba a cabo, el software para acceder a la
web continuaba evolucionando. Junto con nuevas funciones y técnicas rápidas de acceso a
la red, los navegadores también mejoraron gradualmente sus intérpretes Javascript. Más
potencia trajo más oportunidades y este lenguaje estaba listo para aprovecharlas.
En cierto punto durante este proceso, se hizo evidente para algunos desarrolladores
que ni Java o Flash podrían proveer las herramientas que ellos necesitaban para crear las
aplicaciones demandadas por un número creciente de usuarios. Estos desarrolladores,
impulsados por las mejoras otorgadas por los navegadores, comenzaron a aplicar
Javascript en sus aplicaciones de un modo nunca visto. La innovación y los increíbles
resultados obtenidos llamaron la atención de más programadores. Pronto lo que fue
llamado la “Web 2.0” nació y la percepción de Javascript en la comunidad de
programadores cambió radicalmente.
Javascript era claramente el lenguaje que permitía a los desarrolladores innovar y
hacer cosas que nadie había podido hacer antes en la web. En los últimos años,
programadores y diseñadores web alrededor del mundo surgieron con los más increíbles
trucos para superar las limitaciones de esta tecnología y sus iniciales deficiencias en
portabilidad. Gracias a estas nuevas implementaciones, Javascript, HTML y CSS se
convirtieron pronto en la más perfecta combinación para la necesaria evolución de la web.
HTML5 es, de hecho, una mejora de esta combinación, el pegamento que une todo.
HTML5 propone estándares para cada aspecto de la web y también un propósito claro
para cada una de las tecnologías involucradas. A partir de ahora, HTML provee los
elementos estructurales, CSS se encuentra concentrado en cómo volver esa estructura
utilizable y atractiva a la vista, y Javascript tiene todo el poder necesario para proveer
dinamismo y construir aplicaciones web completamente funcionales.
Las barreras entre sitios webs y aplicaciones finalmente han desaparecido. Las
tecnologías requeridas para el proceso de integración están listas. El futuro de la web es
prometedor y la evolución y combinación de estas tres tecnologías (HTML, CSS y
Javascript) en una poderosa especificación está volviendo a Internet la plataforma líder de
desarrollo. HTML5 indica claramente el camino.
IMPORTANTE: En este momento no todos los navegadores soportan HTML5 y la
mayoría de sus funciones se encuentran actualmente en estado de desarrollo.
Recomendamos leer los capítulos y ejecutar los códigos con las últimas versiones
de Google Chrome y Firefox. Google Chrome ya implementa muchas de las
características de HTML5 y además es una buena plataforma para pruebas. Por
otro lado, Firefox es uno de los mejores navegadores para desarrolladores y
también provee total soporte para HTML5.
Sea cual fuere el navegador elegido, siempre tenga en mente que un buen
desarrollador instala y prueba sus códigos en cada programa disponible en el
mercado. Ejecute los códigos provistos en este libro en cada uno de los
navegadores disponibles.
Para descargar las últimas versiones, visite los siguientes enlaces:
• www.google.com/chrome
• www.apple.com/safari/download
• www.mozilla.com
• windows.microsoft.com
• www.opera.com
En la conclusión del libro exploramos diferentes alternativas para hacer sus sitios webs y
aplicaciones accesibles desde viejos navegadores e incluso aquellos que aún no están
preparados para HTML5.